Las mujeres son lo más
bello del mundo, la neta. Son las musas, las que verdaderamente toman las
decisiones. Las obras de arte más importantes de la historia nacieron gracias a
la inspiración de una mujer. Verdaderamente son criaturas hermosas. Sin
embargo, cuando se enojan son tu peor enemigo. Por eso, hay que saber
qué NO decir jamás.
No importa si es tu pareja, tu novia, tu
ligue, tu free, tu esposa o tu compañera de asiento en el camión.
Simplemente hay cosas que NUNCA debes decirle a una mujer. Porque
si lo haces, podrías no estar ahí para contarla.
Apunten, distribúyanlo, hagan captura de
pantalla o lo que quieran. Pero tomen estos tips como algo sagrado.
"Mi mamá dice
que..."
Nada peor que un hombre que toma como
parámetro de comportamiento a su progenitora. Esto sólo demuestra una
de las peores enfermadades que un caballero puede sufrir: mamitis.
Condición incurable.
"Seguro estás en
tus días"
El peor insulto. Merece cachetada,
patada en la espinilla y jalón de patilla. No hay forma de sobrevivir a esto
con dignidad. Además, es estúpido. Es como si ellas de pronto nos recriminaran
nuestro comportamiento por las hormonas. No lo hagan, chavos. De
cuates.
Por su propio bien.
"¡Ssssabrosaaaaa!"
¿Quién en su sano juicio cree que
gritarle esto a una mujer atractiva en la calle hará que ésta caiga rendida a
sus pies? Neta.
"¡Cálmate!"
Estás en medio de una gran discusión.
Injurias vuelan por el aire. Ella te grita hasta de lo que te vas a morir. Tú
ya no tienes argumentos y te sientes avergonzado, por lo que decides aplicar la
graciosa huída. La miras a los ojos y le dices "¡ya cálmate!". Error. Prepárate
para una hora extra de pelea.
"Oye, ¡qué guapa
tu amiga!"
Muchos lo hemos querido decir. Pocos lo
han hecho. Nadie ha sobrevivido para contarlo. Es una injuria total. Si uno
quiere admirar la belleza de las amigas de su mujer, debe ser discreto. Un
movimiento cuasimilimétrico al hacerlo. Jamás se debe
comentar eso. Mucho menos si cuando lo dices estás mirando el trasero de su
amiga.
"¡Estás
loca!"
Tirar de loca a una mujer es lo mismo
que decir "ten, golpea mi cara". Sabemos que las
féminas son algo sensibles, pero la demencia ya es otro grado intocable.
"No te pongas
celosa, es sólo una amiga"
Por eso me manda mensajes todo el día. Y
se los contesto. Y salimos a comer juntos. Y me cuenta sus problemas. Y me dice
que me quiere. Y... chale, así te conocí a ti. ¡Ups!
"No estás gorda,
estás abrazable"
"Y
tú no eres soltero, sólo no tienes novia." debería ser la
respuesta a estas palabras. Sabemos lo delicado que es este tema y todavía
queremos arreglarlo. Lo mejor que podemos hacer cuando nos preguntan ¿Estoy
gorda? es fingir demencia. Fin.
"¿A poco te
peinaste?"
Por lo general las mujeres tardan horas
y horas en arreglarse. Aunque nosotros pensemos que es un simple chongo, ellas
ocupan técnicas súper complejas que hasta el cirujano plástico más
experimentado se sonroja al observarlas. Así que, aunque parezca que no
están peinadas, están peinadas. Y ya. No refunfuñes.
"¿Qué dijiste? No
te estaba escuchando"
¡Tssss! Error fatal. Aunque no estés
escuchando, sé más inteligente. Mírala a los ojos y asiente o niega según lo
amerite la situación. Finge que lo que dice es factor de vida o muerte.
No seas mala onda.
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